Cuadros Acústicos

El acondicionamiento acústico de un local, oficina, restaurante e, incluso, de un comedor escolar no está reñido con la estética. Mas bien al contrario. En los últimos años ha proliferado una amplia gama de productos que mejoran la acústica de una estancia evitando que cualquier sonido, en origen o del exterior, perturben el confort de la sala en cuestión, productos que en algunos casos van dirigidos a aislar acústicamente esa estancia, y en otros, a reducir la reverberación de los sonidos que ahí se producen.

Uno de estos elementos que mayor aceptación tienen para acondicionar acústicamente restaurantes, cafeterías, oficinas, halls, salas de reuniones… son los cuadros acústicos debido a los excelentes resultados que ofrecen para la absorción de sonido, a la adaptabilidad en el diseño, a la facilidad de colocación y a la versatilidad en su ubicación.

Cuadros acústicos decorativos

Muy probablemente la presencia de cuadros acústicos en una sala pasen desapercibidos, camuflados como cuadros decorativos. La posibilidad de serigrafiar los cuadros acústicos con fotografías de pinturas, paisajes, ilustraciones o cualquier otro recurso visual que deseemos permite a los cuadros acústicos ser indetectables para el usuario de una sala.

Los cuadros acústicos de Acústica Decorativa se componen de un marco de aluminio y de un frontal en impresión textil que permite una personalización 100% al gusto del cliente. Los fabricamos a medida, en el tamaño que desea o necesita el cliente alcanzado dimensiones de hasta 10 metros por 3 metros, largo y ancho, y 3 centímetros de espesor.

Personalizar cuadros acústicos

Además del tamaño, la imagen que se muestra en el cuadro acústico la selecciona el cliente, desde su logotipo, hasta una fotografía, de calidad acorde con el tamaño, para que se vea nítida y con colores fieles a la propia imagen. La imagen a aportar debe tener un formato 1:1, tamaño real del propio cuadro acústico, en formato JPG o TIFF y con una resolución mínima de 300 dpi.

Esa impresión textil, en un material que incorpora espuma acústica M1 ignífuga, se fabrica a medida, se tensa sobre el marco para que se muestre robusta, sin arrugas y sin que refleje la luz para que la imagen pueda verse correctamente. Además, el material permite ser lavado no solo por la característica del textil sino también por la facilidad del montaje.

Instalar cuadros acústicos

Nuestros cuadros acústicos se instalan sin necesidad de realizar obras, de forma fácil, rápida y sencilla y se puede colocar directamente en las paredes, como cualquier otro cuadro, o bien anclarlo a paredes o techo con tacos y tornillos tirafondos. En estos casos es necesario aplicar un adhesivo por la cara trasera del panel fonoabsorbente suministrado junto al cuadro acústico, poner el panel acústico en el lugar elegido y aguantar 15 segundos para que el adhesivo se fije. A continuación, montará encima el cuadro acústico.

Una opción, muy interesante para estancias de muchos metros, es colocar estos cuadros acústicos como biombos separadores, cumpliendo así una triple función, la principal, como elemento de acondicionamiento acústico, como elemento decorativo y como panel divisorio de estancias.

En función de los metros cuadrados y del tipo de sala, por la concentración de personas y el nivel de ruido que se produce, será necesario colocar más o menos cuadros fonoabsorbentes. Para ello existe una sencilla fórmula matemática.

Metros cuadros de paneles acústicos necesarios = (m2 de la sala) x (superficie a cubrir %).

Ese porcentaje va a razón de la confortabilidad sonora de la sala en cuestión. No es lo mismo una oficina donde se necesita un nivel de concentración, por lo que se aplicará un porcentaje del 60, que un comedor de un restaurante donde el objetivo es evitar que las conversaciones de los comensales se sumen y se conviertan en un murmullo insoportable que obliga a levantar cada vez más la voz. En este caso se fija un porcentaje del 45.

Así, si nuestra oficina tiene 50 metros cuadrados será necesario cubrir 22,5 (50 x 0,45) metros cuadrados con cuadros acústicos, bien en sus paredes o en su techo. En el caso de un restaurante o cafetería con un comedor de 100 metros cuadrados, el espacio a cubrir es de 60 (100 x 0,60).

Este cálculo sirve de orientación, pero si necesita asesoramiento para mejorar acústicamente una estancia, no dude en ponerse en contacto con el departamento técnico de Materiales Acústicos para su asesoramiento.

Los cuadros acústicos fonoabsorbentes son la solución para reducir la reverberación de altas frecuencias en salas de reuniones, oficinas, restaurantes, cafeterías… se colocan fácilmente, se integran en la decoración de la estancia y, en cualquier momento, se puede modificar la imagen que aparece en ellos.